40 años de SkiWelt Wilder Kaiser – Brixental

Cooperación en lugar de individualismo: 1977: nace SkiWelt, un ejemplo para el mundo de colaboración entre remontes

Hace 40 años dio comienzo una historia de éxito sin parangón: en 1977 se unieron los remontes de seis localidades situadas entre el valle Brixental y la cadena montañosa Wilder Kaiser. Fue el nacimiento de SkiWelt Wilder Kaiser – Brixental.

SkiWelt siempre fue un proyecto de la comunidad —fundado por visionarios y por personas comprometidas con el territorio— que desde el principio sirvió de motor económico para toda una región. Por ejemplo, solo la sociedad SkiWelt Bergbahngesellschaften ha invertido más de 500 millones de euros desde 1977 de forma constante y ha creado numerosos puestos de trabajo.
No obstante, detrás de la marca de éxito SkiWelt siempre han estado las personas y la colaboración entre los compañeros de SkiWelt de igual a igual. El compromiso personal y la clarividencia de muchos de los accionistas, así como la colaboración con los propietarios de tierras, los dueños de refugios, expertos en turismo y numerosas personas comprometidas, fueron claves. Desde los pioneros de los duros comienzos hasta los alrededor de 500 empleados actuales, SkiWelt es un proyecto de éxito comunitario, con un fuerte arraigo en la región y parte importante de la identidad de esta. Lógicamente, en última instancia también cuenta el éxito económico de la cooperación. Sin embargo, sin la fiabilidad de la familia de SkiWelt y el contacto personal entre sus miembros, y sin anteponer el interés de la comunidad al propio, no cabe duda de que SkiWelt no habría triunfado como lo ha hecho.

Nueve localidades con una estructura común

Hoy en día, SkiWelt es uno de los dominios esquiables más grandes y modernos de todo el mundo, y también uno de los destinos de esquí internacionales con más éxito. Al principio, la fusión de empresas de remontes independientes fue acogida con una sonrisa burlona por algunos, pero ya hace mucho que se considera un modelo para las fusiones de estaciones de esquí, que actualmente están a la orden del día. No obstante, los inicios del proyecto fueron bastante humildes. En aquel entonces, la región de los montes Hohe Salve, Zinsberg, Hartkaser y Astberg era poco conocida como destino para la práctica de deportes de invierno. La construcción del primer remonte en 1947 fue el anuncio de la llegada del esquí al valle Brixental. En aquella época también era necesario presentar novedades revolucionarias: en 1947 se construyó en Hopfgarten el telesilla más largo de Europa, con 2.830 metros, y en 1948 se inauguró en Westendorf el remonte más grande de Austria, que en la temporada 1948/49 ya transportaría a 22.289 personas. Durante los años y las décadas siguientes siguieron instalaciones en Söll, Scheffau, Brixen, Ellmau y Going, y, más adelante, también en Itter. De hecho, los proyectos pioneros nunca han dejado de ser la marca de SkiWelt: en 1970 llegó el funicular más largo de Europa, situado en Ellmau; en 1988 abrió el primer telesilla de 8 plazas en Söll y, en 2008, se inauguró el primer remonte impulsado por energía solar del mundo, en Brixen im Thale.

1977: el primer mapa común para todo el dominio esquiable

Las primeras cooperaciones vieron la luz en la década de 1970, y en la temporada 1973/74 se publicó el primer mapa común, antes de que en 1977 se llevara a cabo la fusión que convirtió la zona en el dominio esquiable «Skigroßraum Wilder Kaiser – Brixental». Por primera vez se pudo ofrecer a los visitantes el acceso a todo el dominio con un solo forfait, desde el pase de un día hasta el de temporada. De una vez, SkiWelt (en 1990 este nombre sustituyó al antiguo de «Skigroßraum») pasó a ser el dominio esquiable más grande de Austria y uno de los más grandes de todo el mundo.

Ampliación y modernización continuas y apuesta por la comodidad

Año tras año, las instalaciones se fueron ampliando y modernizando. Gracias a la creación de nuevas pistas y a la mayor variedad de estas, las conexiones entre las diferentes áreas de SkiWelt ganaron en comodidad y la oferta de nuevas experiencias se multiplicó. Tras varios inviernos con poca nieve, en la década de 1990 se instalaron los primeros sistemas de innivación, que se irían ampliando progresivamente. En la actualidad, SkiWelt cuenta ya con 15 embalses para innivación respetuosos con el entorno natural y el equilibrio ecológico. Por cierto, el 100 % de la electricidad para el funcionamiento de la estación y la fabricación de nieve artificial procede de energía verde de la empresa eléctrica TIWAG del Tirol. En otoño de 2017, en la edición de «The Telegraph World Snow Awards», un prestigioso jurado formado por periodistas internacionales otorgó por primera vez el premio a la ecología a una estación de esquí: SkiWelt Wilder Kaiser - Brixental, que así vio reconocidos sus esfuerzos a lo largo de los años.

En los últimos años, las inversiones en comodidad han ocupado los primeros puestos en la agenda de SkiWelt: los antiguos remontes secundarios que transportaban a los esquiadores hasta los remontes principales se han sustituido por telecabinas, y la mayoría de los telesquís han dado paso a cómodos telesillas. Asimismo, se han construido aparcamientos y guardaesquís, y se ha invertido en desarrollar la infraestructura wifi y en crear ofertas combinadas. Tampoco se han descuidado las inversiones técnicas encaminadas a conseguir una seguridad de la nieve aún mayor y una preparación de las pistas impecable. En este contexto, los criterios ecológicos cobran cada vez mayor importancia: el recién estrenado sistema de medición de la nieve por GPS, por ejemplo, permite fabricar nieve artificial y preparar las pistas de forma racional. Por eso los responsables de SkiWelt se han alegrado especialmente al recibir la distinción de «Estación de esquí ecológica del año». ¡Sigamos avanzando juntos, familia de SkiWelt! Nos espera un futuro de éxito.

Una de las estaciones de esquí más modernas del mundo y un destino fantástico todo el año

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